Titanic Replay

Schettino era hasta el fatídico viernes día 13 de enero de 2012, en que naufragó el transatlántico “Costa Concordia”, nada más y nada menos que el capitán Francisco Schettino, la autoridad más importante de un crucero que llevaba 5.000 personas a bordo. Pero Schettino carecía de vocación heroica, y después de dar los avisos “de libro” que le enseñaron en la Academia, en cuanto pudo, puso pies en polvorosa y dijo “marica el último”, metiéndose a continuación en el primer bote salvavidas que pilló. Hoy Schettino, al preparar su defensa, creo que dice que le empujaron y cayó por accidente (al parecer, siempre “es un accidente”) encima de una rusa en aquel fatídico salvavidas. No se sabe bien aún, pero las informaciones que nos llegan dicen que Schettino se quedó en la orilla costera de la isla de Giglio mirando el espectáculo de la impericia, la suya, que dejó al buque varado y vencido de costado. Nadie sabe si, estilo siglo XXI, se puso a grabar la escena con el móvil o quizá tuvo unos instantes de romanticismo, se acordase del Titanic de hace un siglo y se pusiera a silbar a imitación de la famosa orquesta. No se sabe.