Andaba yo pensando que si Dios, nuestro Dios, tiene un
millón doscientos cincuenta mil millones de seguidores en la Tierra, hoy día
podemos ser más que Dios en cuanto reunamos en Twiter uno más que él. Una
entelequia que no es tal, sino que está al alcance de cualquiera y además con
sólo 140 caracteres. De momento, por parte del género masculino, comanda la lista
el señor Obama, cuando por lógica el mejor posicionado debería ser el
representante de Dios aquí abajo, es decir, el Papa Bergoglio. Pero bueno el
Supremo lo habrá querido así para compensar: un negro en Twiter y un blanco en
el Vaticano. En cuanto a las mujeres, es una lucha constante entre varias
famosas, y sin querer criticar los méritos que algunas realizan para estar en los
primeros puestos, ya que cada cual hace lo que puede, podemos decir que las de la frivolité han multiplicado el número de seguidores o seguidoras por el gran mérito de haberse
dejado pelos en la sobaquina. Y claro, otras se lamentan como Ronaldo, pero las
ocasiones hay que pillarlas y las que van a remolque saben que un frondoso
vergel como “El origen del mundo”, de Courbet, sin saber por qué, suma menos.
¡Qué lucha, Dios! ¡Qué lucha para ser como tú! Además, es injusto que demos cifras triviales sólo sobre algunas mujeres y no las demos sobre la canciller Merkel, por
ejemplo, una mujer que se resiste a abrir una cuenta en la Red cuando nadie
duda que sería la gran diosa, con cifras de récord. Y hasta aquí el mundo rico,
ahora dejemos Twiter y hablemos de lo que realmente nos interesa, esos españoles
que ansían la llegada de Dios con la Lotería de Navidad, que este año nos trae dos
sorteos: uno el 20 de diciembre en el que nos puede tocar cualquiera de los cuatro
primeros premios, esto es seguro, y después la clásica, la del día 22, de la
que yo no les puedo dar una participación, pero les daré una recomendación:
busquen con denuedo los números que van a jugar los señores Fabra o Roca, grandes
jugadores que ya han roto todas las leyes de probabilidades, pero no se los
pidan, porque ni se los van a dar ni se los van a enseñar. Estoy por apostar que
uno de ellos les va a decir “que se
jodan”.
En www.salamancartvaldia.com tenéis mi artículo del martes 24/11/2015.
Título: "El plástico de la vergüenza"
jajajaj Que bueno!!!!!!!!!!
ResponderEliminarVaya si yo fuera Dios.................Del cuarto de hora me sobraban 12 minutos para arreglar el mundo.
Y no hacia falta ni Twitter, ni Facebook, ni gaitas.