miércoles, 27 de marzo de 2013

SALUTATUM MORITATUM

Al llegar estas fechas de Pasión, no es ningún secreto para nadie que crezcan los ortodoxos durante estos días para después no pasar por su parroquia durante el resto del  año. Pero existen otros cristianos que careciendo de Pasión salimos a admirar las esculturas, aunque por la fe dormida no nos paremos a venerarlas, ¡Dios nos perdone!, pero sí nos gusta  comer potaje, torrijas y ver aquellas películas que nos cautivaron en la infancia, ya fueran de Romanos o de Cristianos, y que antaño tanto nos identificaban con los héroes, siendo los Kirk Douglas o Charlton Heston de las grandes historias. Pero nunca me había ocurrido dormir y aparecer identificado como Jesucristo en la cruz. Ha tenido que ser de mayor, ahora, anoche mismo, cuando me vi en la cruz con dos ladrones a mi alrededor. Yo bien sé que el Cristo era yo, pero no acerté a descubrir quiénes eran los dos ladrones, ¡qué pesadilla! Los oídos me zumbaban, Pilatos se lavaba las manos y como un retruécano oía a la gente decir: “él es el EREgido”, “crucificadle”, “cruficadle”. ¡Pero si ya estaba crucificado! ¿Qué más querían? “Yo os puedo salvar en este momento, pero si acabáis conmigo qué será de vosotros”, es lo que acerté a decir antes de despertar de aquella pesadilla. Y no vi la vida pasar  en un momento, sino que la vida comenzaba en aquel preciso instante…

No hay comentarios:

Publicar un comentario