La redacción y el ofiuco

Hoy da comienzo la primavera. Es el Día Mundial de la Redacción. Quién no recuerda aquellas redacciones de miel y bamba de nuestra primera infancia, en las que, año tras año, hablábamos de flores, de la graciosa sonrisa y del alegre revolotear de los pajaritos. Aquello valía un 10 y tú te considerabas el Messi-as de la poesía que aún estaba por llegar, cuando en realidad no era otra cosa que una sucesión de topicazos, como los de Messi, que se pasa la vida repitiéndose. ¡Qué vulgar! Después, crecíamos y en la pubertad comenzábamos a añadir porquerías como “la primavera nace en tu semblante” o “todo ha cambiado de color, las chicas ya se quitan ropa” (esto último lo copiamos de “Los Pasos”) y con aquello no llegábamos al 5, pero sin embargo nos partíamos de risa los últimos de la fila. Hoy día los niños se inspiran en los dibujos animados y la primavera son los verdes y floridos paisajes de “Heidi”. Y por cambiar, han cambiado hasta el zodiaco. Yo era un Piscis en primavera. Todo un orgullo. Pero para dar entrada al signo zodiacal número 13, o sea, al Ofiuco, me habían desplazado hacia Aries, que ni es mejor ni peor cuando no crees en estas cosas, pero alguien, que sí creía, tuvo la habilidad de decir que el anterior Caudillo era ofiuco y, de momento, tal signo ha quedado en los caídos en el valle.